Con el “tiempo” como hilo conductor, en el MUJA se muestra la evolución de la vida en la Tierra desde sus inicios hasta la llegada del hombre, haciendo especial hincapié en el Mesozoico o Era de los Dinosaurios y en sus tres períodos: Triásico, Jurásico y Cretácico, a los que hace referencia cada uno de los tres dedos de la gran huella que forma el edificio.
En el MUJA, tan espectacular es el continente como el contenido: El arquitecto Rufino Uribelarrea eligió para el exterior un sistema de láminas de hormigón prefabricado que deja la fachada ciega, a excepción de las puertas de entrada y salida. La cubierta es de cobre viejo, que con el tiempo irá adquiriendo un tono verde integrándose plenamente en el paisaje.
En el interior, una estructura de madera procedente de bosques escandinavos forma un entramado de arcos de medio punto que simulan las costillas de los dinosaurios y ofrecen al visitante la sensación casi mágica de un viaje en el tiempo.
Además el entorno del edificio multiplica las posibilidades de disfrute. Vistas privilegiadas sobre la costa asturiana, zona de juegos infantiles, jardines que permiten paseos entre réplicas de dinosaurios y el Café del MUJA, hacen de la visita al Museo una experiencia única.
Fuente: http://www.museojurasicoasturias.com
Además el entorno del edificio multiplica las posibilidades de disfrute. Vistas privilegiadas sobre la costa asturiana, zona de juegos infantiles, jardines que permiten paseos entre réplicas de dinosaurios y el Café del MUJA, hacen de la visita al Museo una experiencia única.
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